PROGRAMA NACIONAL PARA LA CONSTRUCCIÓN DEL VEHÍCULO ESPACIAL (NASP)-
El programa Nacional para la construcción de Vehículo espacial (NASP), fue una suma de varios proyectos los cuales se alinearon para conseguir un resultado común el cual buscaba que un vehículo volara de la tierra al espacio a velocidades superiores 27.000 Km/hora y después regresará de forma económica y segura.
De acuerdo al Estándar de Gestión del Programas del PMI la gestión de estos se centra en las interdependencias de los proyectos y ayuda a determinar el enfoque óptimo para su dirección, algunas de las acciones que incluye es la coordinación de las fases, resolución de limitaciones de recursos, mitigación de riesgos, alineación de la dirección de la organización que afecten las metas y objetivos del programa y resolución de conflictos dentro de la estructura de gobierno compartido[1], entre otros.
NASP desarrollo su programa en tres (3) diferentes fases: -Fase 1, se forman los equipos adecuadamente para cumplir con los objetivos, -Fase 2, Investigación y Desarrollo y -Fase 3, descripción de la propuesta - acción y alternativas- y se desarrolla una línea base para evaluar el impacto medio ambiental.
Uno de los objetivos principales de la PgMO (Oficina de dirección de programa) de NASP fue mantener enfocados los esfuerzos del personal involucrado en las metas del programa, para lo cual fue fundamental el uso de la Gestión de Comunicaciones de Programas. El alcance esperado era que el equipo fuera competente, integrado y bien enfocado, un gran reto ya que el proyecto estaba conformado por 3 actores principales con diferentes principios e ideologías dentro de los cuales se encontraba el gobierno, la academia y la industria.
Los procesos de comunicación del programa proporcionan vínculos críticos entre los involucrados y el manejo de la información esencial en la Gestión de Comunicación; en este programa se involucraron distintas organizaciones y uno de los puntos clave de éxito del caso NASP fue la integración de la comunicación en la fase 3, la cual se desarrolló mediante una red de telecomunicación entre 100 y 200 personas. En esta misma fase se evidencia el uso de herramientas informativas tales como periódicos y reuniones de las cuales se dejo un archivo escrito que permitió un manejo de la comunicación oportuna y apropiada.
La comunicación para el director de programas implica gastar una cantidad significativa de tiempo con el equipo del programa, los equipos del proyecto, gerentes del proyecto, las partes interesadas y patrocinadores[2]. Desde el comienzo NASP hizo esfuerzos para gerenciar el programa de forma innovadora. La toma de decisiones se realizó en forma conjunta entre el gobierno e industria como norma del programa. La dirección ejecutiva es proporcionada por los directivos de las compañías implicadas y NASA quienes se reunían bimensualmente para guiar el programa, esto es una técnica de involucramiento de los interesados en el proyecto.
Gestionar las comunicaciones en el programa, tanto internas como externas no se pueden subestimar ya que la mayoría de los problemas que se presentan en el desarrollo de proyectos y programas se derivan de la falta de un buen plan de comunicaciones.
Ibeth Elena García Castillo
Estudiante de Maestría en Gestión de Proyectos Universidad EAN – Bogotá
Cátedra dirigida por Ing. Mauricio Ospina Fonseca, PMP, OPM3
www.proyectiza.com
Colombia, Venezuela, Brasil, Panamá, Costa Rica, México, Perú, Ecuador, Chile, Argentina, Uruguay, España
Cátedra dirigida por Ing. Mauricio Ospina Fonseca, PMP, OPM3
www.proyectiza.com
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